Tratamiento De Endodoncia
El tratamiento de endodoncia no es un tratamiento sino es una parte del diente. Es la parte vacío por dentro de un diente que contiene las células y las venas de sangre, y el tejido de nervios que se conoce como pulpa. El diente está formado por los raíces y coronas. La corona está principalmente por encima de la encía, mientras que las raíces están debajo de ella. Las raíces unen el diente al hueso maxilar.
Dentro de la corona y la raíz, o el conducto radicular, se encuentra la pulpa. La pulpa nutre el diente y proporciona humedad al material que lo rodea. Los nervios de la pulpa perciben las temperaturas frías y calientes como dolor. El nombre del procedimiento dental comúnmente conocido como «conducto radicular» es en realidad una terapia de endodoncia, que significa «dentro del diente». Sin embargo, el término “endodoncia” se ha llegado a utilizar comúnmente para hablar del procedimiento.
¿Qué son los conductos radiculares?
Un diente está compuesto por una corona y una raíz. Una corona es la parte visible del diente. Por su parte, la raíz está presente dentro del hueso. La corona se compone de tejidos duros: esmalte externo y dentina interna.
La capa de tejido blando más interna, alojada en la corona y los conductos radiculares, se conoce como pulpa. La pulpa contiene vasos sanguíneos, nervios y tejido conjuntivo, que nutre el diente y mantiene su vitalidad.
La terapia de la endodoncia radicular se realiza en tres pasos.
Limpieza de Endodoncia (canal de raíz)
Principalmente, el dentista extrae todo lo que se encuentra dentro del raíz. El paciente cuando está bajo anestesia local abre un hueco de ingreso pequeño en la superficie del diente y extrae con los dispositivos muy pequeños el tejido de pulpa muerta.
Relleno de Endodoncia (Canal de raiz)
Después el dentista limpia la zona que tiene a dentro vació utilizando las soluciones de irrigaciones y los dispositivos pequeños, los forma y descontamina. Luego, para cerrar completamente los canales se rellena con una materia similar a caucho dental utilizando el cemento pegajoso. Después del tratamiento de canal el diente es muerto. Cuando se extra el tejido de nervios y por estar eliminar la infección el paciente no se sentirá nada de dolor.
Adición de una corona o relleno
Sin embargo, el diente será ahora más frágil de lo que era antes. Un diente sin pulpa debe recibir su alimento del ligamento que lo une al hueso. Este suministro es adecuado, pero con el tiempo, el diente se volverá más quebradizo, por lo que una corona o empaste ofrece protección. Hasta que no se complete la corona o el empaste, el paciente no debe masticar ni morder el diente. Una vez que se coloca una corona o se realiza un empaste, la persona puede usar el diente como antes. El tratamiento a menudo requiere solo una cita, pero si hay canales curvos, múltiples canales o infecciones grandes, esto podría requerir una o dos citas adicionales.
¿Cuándo se requiere un tratamiento de conducto?
Los dentistas recomiendan una terapia de conducto cuando la pulpa del diente está dañada o infectada debido a
- Sensibilidad severa o prolongada al calor y/o al frío.
- Dolor al morder.
- Cavidad profunda
- Un diente fisurado por traumatismo o lesión
- Rellenos dañados o desprendidos
- Un dolor de muelas que lo despierta en la noche.
- Una protuberancia, burbuja o hinchazón en el tejido de las encías.
- Infección de las encías que se extiende hasta la raíz del diente desde el hueso de soporte adyacente
- Decoloración del diente afectado.
Dolor y recuperación después del tratamiento de conducto
Es posible que sienta dolor o sensibilidad de leve a moderado en el sitio tratado durante 24 a 48 horas después del tratamiento. Esto puede aumentar dependiendo de la extensión de la infección en el hueso y las encías circundantes.
Además, el dolor leve de mandíbulas está presente debido a la apertura prolongada de la boca. Su dentista le recomendará que tome analgésicos y antibióticos (si es necesario) durante 3 a 5 días.